Prepara tu alojamiento para el invierno
Hoy comienza el invierno. Aunque la fecha sea más teórica que real, lo cierto es que estamos ya de pleno en el periodo más frío y que reclama con su ambiente una dosis extra de calidez.
Chimeneas, edredones, mullidos sillones abrazadores y alfombras de tonos calientes, conforman el tópico de un interior invernal, con el que todos sueñan encontrar en el hotel o apartamento turístico.
La temporada de invierno tiene dos partes:
Para nuestros alojamientos: las fiestas y la temporada más baja del año. Así que pasamos del cielo al desierto, en unos pocos días de buena caja.
Eso no quita la emoción asociada a los valores de estas fechas: la cercanía, la nostalgia, la ilusión y el ambiente familiar. Nuestros alojamientos deben conseguir un equilibrio entre la discreción y privacidad que a veces buscan nuestros clientes y ese punto de complicidad familiar que requiere el ambiente de las fiestas.
Navidad y fin de año son fundamentalmente un tiempo de bonanza. Cada vez más la gente se decide a salir y a buscar en hoteles y casas rurales el servicio cálido y cuidadoso que cuesta mucho esfuerzo conseguir en casa.
Pero la segunda parte requiere muchos más esfuerzos. Gran parte del sector turístico dedicado a los alojamientos, se tomas las vacaciones a partir de la mitad de enero. Aunque haya fines de semana y en algunas regiones queden algún puente pendiente. Aunque tengamos por ahí a San Valentín haciendo guiños, lo cierto es que baja la ocupación de forma tan drástica que da miedo.
Pero no todo está perdido, una buena temporada de fiestas, puede ayudarnos a mejorar el rendimiento cuando llegue febrero y la mitad oscura de marzo.
Aquí tienes 10 tips para preparar tu alojamiento para el invierno
Unas bolas, unos lazos rojos o alguna rama de acebo, ayudan a identificarnos con las tradiciones navideñas. Pero algunos entusiastas recargan la decoración con tonos verdes y rojos, bolas doradas, osos polares y Papás Noel gigantes, hasta abrumar a sus clientes.
¡Hay hasta toallas de color verde y rojo para los días de navidad!
El equilibrio, la iluminación y los detalles de decoración de calidad, como cojines, terciopelos o cubrecamas, refuerzan el efecto sin llegar a marcar tópicos religiosos o tradiciones no siempre compartidas. Unos centros de frutos secos y frutas pueden dar ese toque acogedor sin recargar el ambiente.
Fuente:http://decoracion.facilisimo.com
Para dar una bienvenida acogedora ofrece una bebida caliente, un consomé a la llegada, un trago de brandy en copa balón previamente. Coloca un perchero para abrigos, bufandas y gorros y un paragüero en la entrada. Cuanto más fácil y cómo lo muestres a tus clientes mayor será su atención hacia tu alojamiento.
Fuente:https://okdiario.com
La habitación es una “cueva” que nos protege de la era glacial. La cama, omnipresente icono de la hospitalidad, debe estar vestida para remarcar ese efecto de refugio.
Cambiar el cubrecama, utilizar los colores, añadir unas zapatillas o una bata al equipo del baño, pueden ayudar. Mullidos cojines o una manta sobre un sillón, son un ofrecimiento tentador para ese efecto “cueva”.
Fuente: http://www.cerilene.com
Enciende la chimenea y/o la calefacción antes de que lleguen tus clientes regulando la temperatura sin crear sensación de agobio. Unas buenas cortinas pueden ser clave ya que las horas de sol son cortas y la mayor parte del día se necesita un buen aislante de frío. Combinado con los textiles tus clientes sentirán protección térmica. La habitación no tiene que ser ni sauna, ni una aséptica habitación de hospital.
Fuente: https://www.newyorker.com
¿Hay algo que se identifique más con la hospitalidad, que sentarse cómodamente en un buen sofá frente a la ventana desde la que se observa el frío exterior frío y lluvioso?
Tanto las habitaciones como las áreas comunes deben resaltar esa relación: ¡qué bien se está aquí dentro, comparado con ese bello y frío paisaje invernal!
Es necesario buscar esos puntos desde los que se puede observar el exterior, y mantener los jardines y los espacios exteriores ordenados y limpios. El invierno puede ser frío, pero no debe ser triste y desordenado.
Si la piscina está fuera de uso cúbrala con una lona de seguridad.
Hemos de evitar el aspecto de abandono de algunas áreas que no van a poder usarse en estas fechas.
Fuente: https://www.pinterest.es
Estudia la posibilidad de lanzar nuevas promociones y ofertas, así como servicios extra para fechas navideñas. Los packs y experiencias siempre animan a viajar.
Hay actividades de exterior que solo pueden hacerse en estas fechas: esquiar, jugar con la nieve o tirarse en trineo. Es un tiempo estupendo para disfrutar en familia.
Fuente: http://yoopa.ca
Dejemos a nuestros clientes que hagan pereza y se levanten tarde. Organicemos un desayuno flexible, fácil de montar y de servir pero que pueda permanecer disponible hasta horas que en otras circunstancias definiríamos como intempestivas.
Ofrecer con un guiño el “desayuno en la cama”, explorar un “brunch” tardío los días siguientes a las noches mágicas…, en fin, ponernos en los zapatos de nuestros clientes.
Seamos flexibles con las entradas y salidas e incluyamos un ”plus” para recuperar fuerzas. En estas fiestas el alojamiento debe ser una “mama consentidora”
Fuente:https://www.pinterest.es
Para todas las cocinas del mundo, el tiempo invernal se asocia con sopas calientes para entonar el cuerpo. Las grasas también son necesarias para combatir el frío, muestra una cocina de caza con prestigio.
No olvides los postres, cuide la calidad del café y la selección de licores. El invierno es también tiempo de largas sobremesas.
Fuente: https://www.hola.com
Si hay una época del año que requiere de la presencia del propietario, es esta. Las fechas están tan cargadas de sugerencias emocionales, que el cliente está pidiendo esa relación “especial”. Presencia calidad, discreción en trato, y sentido del mimo, pueden hacer la diferencia.
Recalca lo bien que se está en el hotel, pregunta si la temperatura es la deseada. Intenta evitar comentarios sobre el mal tiempo y lo mal que se pasa con el frío.
Si ha conseguido todo lo demás, aproveche el ambiente para promocionar otras temporadas. Folletos de actividades para la primavera o el verano, ofertas especiales, “semanas de …”
El año es muy largo y pocas veces tenderemos a nuestros clientes en situación más receptiva. No todo van a ser redes sociales o noticias de la página web, ahora los tenemos disponibles para el marketing directo.
Eso sí, con discreción y respiro. Queremos que vuelvan, no que nos vean como un vendedor a domicilio.
Chimeneas, edredones, mullidos sillones abrazadores y alfombras de tonos calientes, conforman el tópico de un interior invernal, con el que todos sueñan encontrar en el hotel o apartamento turístico.
La temporada de invierno tiene dos partes:
Para nuestros alojamientos: las fiestas y la temporada más baja del año. Así que pasamos del cielo al desierto, en unos pocos días de buena caja.
Eso no quita la emoción asociada a los valores de estas fechas: la cercanía, la nostalgia, la ilusión y el ambiente familiar. Nuestros alojamientos deben conseguir un equilibrio entre la discreción y privacidad que a veces buscan nuestros clientes y ese punto de complicidad familiar que requiere el ambiente de las fiestas.
Navidad y fin de año son fundamentalmente un tiempo de bonanza. Cada vez más la gente se decide a salir y a buscar en hoteles y casas rurales el servicio cálido y cuidadoso que cuesta mucho esfuerzo conseguir en casa.
Pero la segunda parte requiere muchos más esfuerzos. Gran parte del sector turístico dedicado a los alojamientos, se tomas las vacaciones a partir de la mitad de enero. Aunque haya fines de semana y en algunas regiones queden algún puente pendiente. Aunque tengamos por ahí a San Valentín haciendo guiños, lo cierto es que baja la ocupación de forma tan drástica que da miedo.
Pero no todo está perdido, una buena temporada de fiestas, puede ayudarnos a mejorar el rendimiento cuando llegue febrero y la mitad oscura de marzo.
Aquí tienes 10 tips para preparar tu alojamiento para el invierno
1 Adornos sí, pero con moderación
Unas bolas, unos lazos rojos o alguna rama de acebo, ayudan a identificarnos con las tradiciones navideñas. Pero algunos entusiastas recargan la decoración con tonos verdes y rojos, bolas doradas, osos polares y Papás Noel gigantes, hasta abrumar a sus clientes.
¡Hay hasta toallas de color verde y rojo para los días de navidad!
El equilibrio, la iluminación y los detalles de decoración de calidad, como cojines, terciopelos o cubrecamas, refuerzan el efecto sin llegar a marcar tópicos religiosos o tradiciones no siempre compartidas. Unos centros de frutos secos y frutas pueden dar ese toque acogedor sin recargar el ambiente.
Fuente:http://decoracion.facilisimo.com
2 Se trata de detalles, sé cálido desde el principio
Para dar una bienvenida acogedora ofrece una bebida caliente, un consomé a la llegada, un trago de brandy en copa balón previamente. Coloca un perchero para abrigos, bufandas y gorros y un paragüero en la entrada. Cuanto más fácil y cómo lo muestres a tus clientes mayor será su atención hacia tu alojamiento.
Fuente:https://okdiario.com
3 Ambientar la “cueva” de la habitación
La habitación es una “cueva” que nos protege de la era glacial. La cama, omnipresente icono de la hospitalidad, debe estar vestida para remarcar ese efecto de refugio.
Cambiar el cubrecama, utilizar los colores, añadir unas zapatillas o una bata al equipo del baño, pueden ayudar. Mullidos cojines o una manta sobre un sillón, son un ofrecimiento tentador para ese efecto “cueva”.
Fuente: http://www.cerilene.com
4 Ni horno ni congelador
Enciende la chimenea y/o la calefacción antes de que lleguen tus clientes regulando la temperatura sin crear sensación de agobio. Unas buenas cortinas pueden ser clave ya que las horas de sol son cortas y la mayor parte del día se necesita un buen aislante de frío. Combinado con los textiles tus clientes sentirán protección térmica. La habitación no tiene que ser ni sauna, ni una aséptica habitación de hospital.
Fuente: https://www.newyorker.com
5 ¡Qué bonita es la nieve detrás de una ventana!
¿Hay algo que se identifique más con la hospitalidad, que sentarse cómodamente en un buen sofá frente a la ventana desde la que se observa el frío exterior frío y lluvioso?
Tanto las habitaciones como las áreas comunes deben resaltar esa relación: ¡qué bien se está aquí dentro, comparado con ese bello y frío paisaje invernal!
Es necesario buscar esos puntos desde los que se puede observar el exterior, y mantener los jardines y los espacios exteriores ordenados y limpios. El invierno puede ser frío, pero no debe ser triste y desordenado.
Si la piscina está fuera de uso cúbrala con una lona de seguridad.
Hemos de evitar el aspecto de abandono de algunas áreas que no van a poder usarse en estas fechas.
Fuente: https://www.pinterest.es
6 Crea ofertas especiales y vende el invierno como una temporada única
Estudia la posibilidad de lanzar nuevas promociones y ofertas, así como servicios extra para fechas navideñas. Los packs y experiencias siempre animan a viajar.
Hay actividades de exterior que solo pueden hacerse en estas fechas: esquiar, jugar con la nieve o tirarse en trineo. Es un tiempo estupendo para disfrutar en familia.
Fuente: http://yoopa.ca
7 Cambiar horarios y flexibilizar servicios
Dejemos a nuestros clientes que hagan pereza y se levanten tarde. Organicemos un desayuno flexible, fácil de montar y de servir pero que pueda permanecer disponible hasta horas que en otras circunstancias definiríamos como intempestivas.
Ofrecer con un guiño el “desayuno en la cama”, explorar un “brunch” tardío los días siguientes a las noches mágicas…, en fin, ponernos en los zapatos de nuestros clientes.
Seamos flexibles con las entradas y salidas e incluyamos un ”plus” para recuperar fuerzas. En estas fiestas el alojamiento debe ser una “mama consentidora”
Fuente:https://www.pinterest.es
8 Cambia la carta
Para todas las cocinas del mundo, el tiempo invernal se asocia con sopas calientes para entonar el cuerpo. Las grasas también son necesarias para combatir el frío, muestra una cocina de caza con prestigio.
No olvides los postres, cuide la calidad del café y la selección de licores. El invierno es también tiempo de largas sobremesas.
Fuente: https://www.hola.com
9 La calidez también está en el trato
Si hay una época del año que requiere de la presencia del propietario, es esta. Las fechas están tan cargadas de sugerencias emocionales, que el cliente está pidiendo esa relación “especial”. Presencia calidad, discreción en trato, y sentido del mimo, pueden hacer la diferencia.
Recalca lo bien que se está en el hotel, pregunta si la temperatura es la deseada. Intenta evitar comentarios sobre el mal tiempo y lo mal que se pasa con el frío.
10 Aproveche la “buena onda” para promocionar otras temporadas.
Si ha conseguido todo lo demás, aproveche el ambiente para promocionar otras temporadas. Folletos de actividades para la primavera o el verano, ofertas especiales, “semanas de …”
El año es muy largo y pocas veces tenderemos a nuestros clientes en situación más receptiva. No todo van a ser redes sociales o noticias de la página web, ahora los tenemos disponibles para el marketing directo.
Eso sí, con discreción y respiro. Queremos que vuelvan, no que nos vean como un vendedor a domicilio.